La pandemia ha puesto en jaque muchas de las ventajas de la vida urbana, como las oportunidades de entretenimiento en vivo y la intensa interacción social. Esto nos obligó a buscar alternativas y estimuló muchas innovaciones tecnológicas en todas estas áreas. La gente ha visto que ahora es posible trabajar desde cualquier lugar, que podemos estar cerca de amigos que están lejos, beneficiarnos del delivery, de las compras por internet, del acceso ilimitado al entretenimiento digital. Si esto es peor o mejor, como todo en la vida, todo tiene ventajas y desventajas, el caso es que si antes tener una casa en el campo era considerado un capricho de pocos, hoy es una alternativa de vida viable y saludable.
Y nada te impide seguir disfrutando de las ventajas de la gran ciudad, pero en los momentos que más te convienen.
El caso es que en la gran ciudad, entre semana, no disfrutamos de sus ventajas, prácticamente solo nos enfrentamos a lo peor: el tráfico, los altos costos de los alimentos, sin mencionar las inundaciones y los daños causados por la falta de planificación. Si te identificas con algunas situaciones como esta, sabes que necesitas una alternativa.
Por eso, este post trae 14 pruebas de que tener una casa en el campo es una solución muy interesante para la calidad de vida en general, ¡solucionando mucho más de lo que te imaginas!
1. Tener una casa en el campo aporta más tranquilidad
Una casa en el campo es sinónimo de mayor tranquilidad, ya sea por la menor densidad de personas, automóviles y mayor contacto con la naturaleza. También proporciona un contacto más intenso con los seres queridos, pudiendo hospedarlos por un período corto.
Además, la quietud del espacio circundante favorece que la mente y el cuerpo estén más relajados, especialmente en los días laborables entre semana.
2. Genera más salud
El entorno de una casa de campo y la disposición del inmueble, con vista a áreas verdes, piscina, deck, entre otros atributos, promueven la salud en su conjunto. Sobre todo por lo mental, que debe ser tan cuidadoso como lo físico.
Asimismo, el contacto con la naturaleza, la distancia del aire, la contaminación acústica y visual, mejoran notablemente la salud.
3. Promueve más calidad de vida
La calidad de vida está íntimamente ligada al lugar de residencia o incluso a un espacio dedicado al descanso. En ese sentido, gana mucho con una casa en el campo, ya que la ubicación y el estilo de vida que se le suma la benefician.
Pasar más tiempo en familia y tener momentos de diálogo, dedicarse a cocinar para amigos y familiares, estudiar, salir a caminar al aire libre. Estos son solo algunos de los principales atractivos que trae de inmediato una casa en áreas verdes.
4. Plantea un nuevo estilo de vida y retos
Mudarse a una casa de campo o pasar temporadas, fines de semana y vacaciones en este espacio es una salida a la rutina. Por tanto, todo lo que aporta este tipo de inmuebles provoca cambios positivos en la vida cotidiana.
Algunos de los cambios de estilo de vida y desafíos que trae una casa de campo incluyen planear quedarse con la familia, viajar al lugar y salir de las mismas rutinas y tareas diarias.
Además, sembrar frutas y verduras para el autoconsumo y tener momentos de desconexión total de los hábitos cotidianos, ayuda a tonificar la mente y promueve nuevas ideas a partir de estos nuevos desafíos.
Hay una tendencia en Estados Unidos, que ya se está extendiendo al resto del mundo, llamada Community Farm to Agrihood.
El concepto funciona con el propósito de garantizar una cultura de cultivo y consumo en pequeños espacios colectivos que atienden a los distintos pobladores de la región.
Para que una finca comunitaria funcione de la mejor manera, se asigna a una persona más experimentada para que atienda el área con frecuencia. Además, los propios
vecinos también pueden colaborar para el cuidado local, generando una iniciativa colectiva que beneficie a todos en una misma zona.
Mayor variedad de alimentos, frescura de los productos, garantía de origen y contacto familiar con los vecinos son beneficios que refuerze modelo de cultivo. Y lo que también impulsa es una vida comunitaria más colaborativa.
CASA DE CAMPO – CONDOMINIO SELECT HOMES – PISCO, ICA.
5. Abre más tiempo para dedicarlo a pasatiempos y familia
Ya sea jugar fútbol, cocinar, sembrar, escuchar música, tocar algún instrumento, escribir, coser u otras actividades, estas acciones piden un espacio para desarrollarse.
Los pasatiempos funcionan como una terapia para quienes los practican. En este sentido, tener una casa en el campo es una forma de dar rienda suelta a ese lado sensorial, artístico y técnico que reside dentro de cada persona.
Las ganancias en salud mental son enormes, asegurando una vida mucho más saludable, más cercana a lo que realmente te gusta hacer.
6. Aumenta el contacto con la naturaleza
Estar en contacto con la vegetación, los ríos, los animales y el paisaje de la naturaleza es sumamente relajante.
Y además del entorno verde, tener un terreno generoso requiere un proyecto de paisajismo muy bien pensado, para integrar la flora con tu propiedad, acercando la naturaleza a tu espacio y a tu hogar, lo que ahora llamamos arquitectura biofílica.
7. Garantiza un activo para disfrutar también en la jubilación
En un escenario económico de bajas tasas de interés, la inversión en una propiedad rural resulta ser una gran alternativa que combina una apreciación constante en el tiempo, con un costo relativamente bajo para una propiedad similar en la ciudad, además de la posibilidad de obtener ingresos a través de plataformas digitales de intercambio inmobiliario.
. Una casa en el campo es, por lo tanto, un patrimonio que disfrutan tanto usted como sus hijos y brinda los mismos beneficios durante varias generaciones, siendo una inversión a largo plazo.
Además, la propiedad rústica tiende a disfrutarse más durante la jubilación, ya que hay más tiempo libre disponible. Consolidándose como un espacio de alta calidad de vida para cuando necesites bajar más el ritmo para disfrutar de otra etapa de la vida.
8. Vigoriza la mente y el cuerpo
A veces es necesario distanciarse de los lugares e incluso de las personas. Es decir, estar solo y reflexionar sobre la propia vida y los próximos pasos a dar hacia las metas personales y profesionales. Para estos períodos, la casa de campo es el retiro perfecto.
Este momento solo o solo con las personas más íntimas sirve como un espacio de fortalecimiento y respiro para regresar a las tareas y desafíos diarios, con más vigor. Mente y cuerpo sienten la diferencia de un periodo de descanso, para retomar la vida con más equilibrio.
9. Brinda espacio para criar a los niños de manera más segura.
Si tienes hijos o estás pensando en tenerlos, una casa de campo es uno de los mejores lugares para criarlos con seguridad y dedicación. Porque muchas veces, la rutina en las ciudades aleja a las personas de su propia casa.
La casa rural lo que hace, entonces, es asumir un papel de fuerza para que la familia esté más unida y disfrute juntos de momentos únicos con los más pequeños,
colaborando a construir lazos más fuertes entre todos y proporcionando más momentos lúdicos a los niños.
Son descubrimientos sensoriales en medio de la naturaleza, como jugar en los árboles, en el suelo, caminar descalzos sobre el césped, observar animales y plantas, y jugar con lo que ofrece el entorno natural, como construir casas y juguetes. Esto convierte al campo en un parque educativo seguro y lleno de sorpresas para los más pequeños.
10. Inspira nuevas ideas y conceptos
Especialmente para quienes trabajan en áreas que demandan constantemente nuevas ideas para innovar en el área de trabajo, la casa en el campo es un centro de buena inspiración.
Tener este reducto con áreas verdes, agua natural de cascadas o represas y lagos, ayuda a volverse hacia uno mismo y buscar nuevas ideas y reflexiones. Especialmente en estos momentos y lugares surgen soluciones que eran difíciles de encontrar.
La disponibilidad de espacio también te permite dedicarte a hobbies, crear un atelier o un taller para dar a nuevos descubrimientos personales.
Allí hay una casa histórica que él renovó, además de haber construido un enorme jardín con elementos de la demolición de antiguas casonas en Río de Janeiro. Burle Marx también honró las composiciones vegetales de la zona, reuniendo una de las colecciones de plantas semitropicales y tropicales más grandes e importantes del país, que son impresionantes.
11. Aporta más flexibilidad a la rutina
El cambio de ubicación, tanto para quien busca vivir en una casa en el campo o simplemente pasar unos días en ella, favorece una flexibilidad muy beneficiosa en la rutina.
Como ejemplo, con la creciente digitalización de los servicios y el home office adoptado como estándar para varios sectores, una casa fuera de la ciudad colabora para la actividad.
Así, los viajes a la ciudad y los viajes de negocios serán menos estresantes con la certeza de hospedarse en un lugar más acogedor y tranquilo otros días.
Asimismo, construir o comprar una casa en el campo es la opción habitacional de muchas personas que al mismo tiempo no abandonan el entretenimiento y los servicios de la capital.
12. Es una inversión con una economía estratégica
No es una regla para todos los casos, sin embargo, en la mayoría de ellos, el metro cuadrado de una casa en el campo tiene mejor costo-beneficio en comparación con una propiedad en la ciudad.
La baja demanda y competencia por el espacio, y la mayor oferta son algunos de los factores que llevan a los inmuebles en el campo a ser inversiones estratégicas. Con este cambio, puede invertir en una construcción de mayor nivel, mejorando aún más la propiedad.
13. Tiene un menor costo de vida
Con la ventaja de vivir y trabajar en la casa de campo, tener menos viajes en automóvil y aún tener la infraestructura cerca, el costo de vida se vuelve más bajo.
Además de estos beneficios inherentes a este tipo de vivienda, la ventaja de sembrar y cosechar tus propias frutas, verduras y especias también favorece el costo de vida. En una gran ciudad, ir al supermercado y tener todo el trabajo que generan estos viajes, incrementa los costos con transporte, estacionamiento, valor de los productos y mayor tiempo para realizarlos.
4. Ofrece más espacio por el mismo precio
En la ciudad, la disputa por metro cuadrado es mayor, ya que la densidad de población es alta en la mayoría de los barrios. Por esta razón, el mercado inmobiliario pone en la agenda valores más altos para espacios que muchas veces pueden no cumplir con las expectativas y necesidades del residente.
En conjunto, la casa de campo ofrece más espacio en todos los ambientes, que se puede disfrutar con gran libertad, por un valor similar a las casas y departamentos de la ciudad. Es claro que el costo-beneficio es más ventajoso en áreas verdes.
Si tus dudas sobre tener o no tener una casa en el campo eran de lo más diversas, este post habrá respondido a varias de ellas. Ahora que ya sabes qué ventajas tendrás al trasladarse definitivamente a zonas verdes, o incluso pasar largas temporadas en ellas, es momento de pensarlo seriamente.
Y cuando sea el momento de pensar en un proyecto arquitectónico y paisajístico para hacer realidad el sueño de una casa de campo, ¡cuenta con NORTCONS SAC!
CASA DE CAMPO – SANTO CRISTO – MALA, CAÑETE.
CASA DE PLAYA – CONDOMINIO CLUB DE PLAYA LAS PALMERAS- CERRO AZUL, CAÑETE